Wednesday, November 18, 2009
Lo protagonizó Lorena cuando el reloj marcó 8:25 PM
El aspecto enérgico de tus manos ávidas, sedientas y traviesas, me dispara la danza de los huesos, del suspiro, del designio, de la muerte y la palabra, aún de la bendición. El resto: los estantes, el olvido y el disfraz, luego, poco importan.
Somos almas que pululan en suaves ondas cíclicas, o quizá no. Somos esto, encuentro y trasnoche, sudor y ganas y ese querer comerse la vida aunque queme un poco, solo eso... fuego, deseo, el punto medio, el descanso.
Dibujas con fuego y me tienta el verte ahí, tan simple y tan uno. Escurridizo, como el aire y las olas. Un poco etéreo. Leve como los momentos.
Queda tu olor y tu suspiro embriagándolo todo y tus manos en mi, queda la sonrisa y la promesa, queda el después. Otra vez, y otra vez...
Somos eso que le molesta a los formales.