-Tengo que hacer dormir a Martín-dije viendo atentamente el reloj-Quién es Martín?-preguntó ansiosa.-Martín? mi hijo, si lo vieras es muy lindo, se gana el corazón de todos!-Tienes un hijo?-preguntó mientras parecía morirse de la curiosidad-Pues si-respondí- tiene 10 meses y 5 dientes...
-Con quién te casaste?? es guapo? es doctor?- preguntaba casi saltando de la emoción!-No, no me casé nunca, me fuí a vivir a Argentina y conocí a un tipito que me comió el cuento y me hizo un hijo, luego se lavó las manos...vivo con Martín y con mamá, ah y también mi abuelita-dije, como suelo hablar, siempre con mucha naturalidad, aunque a los demás les incomode la respuesta- Y EL PRINCIPE AZUL?-se veía realmente decepcionada-Me temo que nunca apareció, lo siento...-no? pues eso me hace sentir bastante mal...-me dijo, se la veía preocupada, enojada con la vida...-No te preocupes,-la consolé-aprenderás a aceptarlo...no es tan malo, tienes un hijo y lo amas, a veces, te sentirás sola, a veces te dolerá no compartir ciertas cosas, pero cuando estés con él no existirá otra cosa...-y mi rostro dibujó una sonrisa tratando de crear una nueva esperanza...al parecer no tuvo mucho efecto en la niña de el cabello rizado y de piel blanca que seguía sin consuelo-Sé que te importa mucho eso, pero aprenderás que hay también otras cosas muy emocionantes...especialmente con tu hijo-le dije.
Por qué un hijo tan joven?-preguntó consternada, yo sonreí levemente-No creas, ni tan joven, tengo 23 años, está bien, llegó en buen momento, aunque de sorpresa...-dije tranquilizándola-23?!?! pero si no pareces sino de 19!, no se te nota la edad pareces una niña...te pareces mucho a...-se interrumpió....-A quién? a ti? Pues sí lo oigo muy a menudo, menos mal, tengo aún cara de niña...eso es una buena cosa, nunca creen que soy mamá, ya ves...siempre parecí una niña, nunca me cambió la cara-Pareció que la noticia le causaba un sentimiento neutral, un quemeimportismo-Bien-me dijo...
Qué tal te va en clases?-Cambió súbitamente de tema-Pues verás, dejé de estudiar por mucho tiempo, ya la verdad no sé por qué, pero siempre me gustó mucho leer- sí me gusta mucho leer también-dijo-Lo sé respondí, ya estás en edad...ahora curso el primer ciclo de psicología clínica-dije sin ningún orgullo-PSICOLOGIA CLINICA?- se la notaba bastante sorprendida-Pero si yo quiero ser doctoraaa!-murmuró casi desesperada-Y QUERRAS SER MUCHAS COSAS MAS....pero te decidiras por eso, al final, no es tan malo...-
Y el asma? cómo te fué con ese asunto?-preguntó, ya bastante ardida por el resto de la información-Asma? nooo eso se me fué en el desarrollo casi del todo, dicen que por un polvito que sacan del carapacho del armadillo, yo más bien creo que es porque ya cumplió su función completa la enfermedad, me vuelve de vez en cuándo pero sin mucha fuerza-le dije-Yo tomo ese polvito de armadillo, se lo recomendó el pediatra a mi mamá-explicó-YO YA NI SE COMO ME ENTERE DE ESE SECRETO-dije algo pensativa-Pues ahora ya lo sabes, lo recuerdas ahora?-dijo, y esto me resultó bastante curioso...-Es cierto...

Hoy sentada con Auravioleta en San Marino le comenté hoy que había releído por milésima vez el cuento de Jorge Luis Borges, EL OTRO, pero que esta vez me había conmovido especialmente, porque por alguna razón me imaginé que un encuentro con la ALICIA de hace 15 años atras hubiera sido bastante decepcionante para ella...Mi realidad actual.
Auravioleta me dijo: ES QUE BORGES SE VIO A SI MISMO COMO BORGES, BORGES ERA BORGES TU ERES...nada, yo no soy nada la interrumpí, sabiendo que NUNCA seré ni la sombra de Borges y conformándome humildemente a eso, sin ningún tipo de pretensiones...Eso es lo triste...en esa época soñaba con cosas diferentes para mí...y me pregunté toda la tarde de cómo sería más o menos la conversación...Alicia sería Alicia tal como Borges fue Borges...esa es la respuesta...así, como dije es como me imagino MI CUENTO...