Además de la extensa lista de síndromes y patologías psiquiatricas de las que parezco sufrir, también padezco del síndrome de Peter Pan lo que me hace MUCHAS VECES hacer el ridículo...
El síndrome de Peter Pan es el del niño que jamás creció, que se negó a crecer, tanto, tanto, me negué a crecer que se puede observar en mi escasa estatura...
He convivido con adultos mucho tiempo ya, y la verdad es que todavía no logro acostumbrarme, los adultos son muy estúpidos, nosotros los niños debemos explicarles todas las cosas, cuando me topo con una persona mayor que parece valer la pena la someto a la prueba de mis dibujos, pero casi siempre, con MUY pocas excepciones de la regla, me dicen que es un sombrero, lo que me deja MUY, MUY decepcionada entonces les hablo de política y de corbatas y ellos piensan AY QUE PERSONA TAN RAZONABLE...
Si alguien realmente me ve de cerca, tengo la expresión, la pinta de una niña de 16 años, y realmente quisiera tenerlos! pero lamentablemente, aunque no logre acostumbrarme NO ES ASI...
Busco todo el tiempo aventuras con espejos, piratas, sirenas, y niños perdidos, corderos y rosas...todo el tiempo...ahora soy una madrecita, como Wendy...solo que yo soy mamá al estilo adulto...
La gente realmente se sorprende en la calle porque mi actitud con mi hijo normalmente NO ES LA CORRECTA...me meto en las casitas de juguetes...juego, grito, salto y pataleo, me río de manera histérica y bailo, cuándo estoy sin él trato de mantener la cordura y los modales en mi comportamiento...porque la gente que está conmigo muchas veces se averguenza....realmente me gustaría poder ser más YO de vez en cuándo, pero generalmente me tachan de ridícula...
Cuándo por alguna razón entramos a una juguetería NO HAY MANERA de que no salga, al menos con un paquete de tarros de plastilina con la mirada apenada y de reproche de mi mamá, decepcionada talvez...
Una niña con un niño...eso es lo que somos Martín y yo, dos niños.
A veces juego a ser una adulta, hago mis famosos análisis sociologicos en lo que mi mente infantil contribuye UN MONTON y ando con cara de pocos amigos...por lo general, porque eso es repelente de personas mayores...mi cabeza, que nunca se calla, me habla de valles encantados, de unicornios, de duendes y de elfos...
Y sí YO SI CREO EN LAS HADAS!!! MARTIN Y YO SI CREEMOS!!! (hay dos hadas que todavía viven de nosotro depende)