El chusmerío siempre puede llegar a ser una buena obra de arte pero hay que aceptar que este tipo de arte en algún momento se vuelve pegajosa, pesada, tediosa, en cambio cuando la obra de arte se produce con solo mirar alrededor, ahora tenemos que ver paredes, techos, gatos, palos, ventanas, edificios, hemos edificado nuestras pequeñas cárceles...ínfimas cárceles, pero aún puedo decir que en ciertas ciudades el arte aún te susurra contínuamente al oído porque vive en las esquinas, en los parques, en los viejos edificios, en el restaurante...casi sin querer parecen recitarte un poema, cantarte una canción o pintarte un cuadro...eso es precisamente lo que hace lo hermoso, susurrarte el arte al oído y en donde no es tan necesario la mano del hombre, tan solo su percepción de las cosas que lo rodean que se tornan poéticas o inspiradoras...cuando el hombre estaba mas cerca de la naturaleza era cuando el poema, la música y los diferentes tipos de arte vivían en el aire, las hadas bailaban en las fuentes, las niñas las imitaban y todo era hermoso porque las sirenas aún existían...no habían edificios ni industrias, era fácil escribir un libro. Parmenides, que vivía entre arboles y rocas, en Grecia...la roca recuerda quienes fueron, y la belleza de el paisaje recuerda quienes son, como no hacer filosofía???
Hoy venía de casa de mi tía en el carro y quise mirar el cielo, me resulto particularmente difícil, lo vi saludarme entrecortado, con edificios, carteles de publicidad y sentí pena por mi hijo, cómo verá el cielo mi hijo? luego, no quise ponerme sentimental pero me pudo la mi pasión, cómo hacen los artistas para escribir una sinfonía genial ahora, cómo ahora alguien escribe un poema sin soñar en cómo se veía la naturaleza aún cuando la ven poco, ahora hay que hacer poesía y música de la mierda, del pantano, de Sodoma y Gomorra, del caos, de la mentira, de un cigarrillo insipido, de un pedazo de imán destruído, de un triciclo...es más difícil llegar a conmover con ese tipo de elementos grotescos que con pájaros y ríos acaudalados, ojalá todavía podamos seguir teniendo por mucho tiempo ese momento para escaparnos donde no se vean edificios, donde todo sea verde, marrón o blanco pero hecho por la naturaleza que es la verdadera autora de los poemas y de las melodías. Ahora toca a los artistas hacer poesía de los sartenes y de los sacapuntas...suerte con eso, menos mal no me veo entre los artistas, soy una persona común, una simple observadora, pero algunos fenómenos de la vida diaria me dejan absorta, muchos simplemente me hacen reír, cuánto esfuerzo puesto en una poesía actual! cuánto trabajo en una buena pieza musical ! Quería sentir que le daba un reconocimiento especial, y que queden pruebas de ello, a los artistas de este tiempo en donde se ven edificios, aquellos a quienes las hojas y el viento les siguen dictando al oído en cualquier lenguaje con el que se conecten aún en el humo de un cigarrillo inútil superfluo y sin importancia los poemas, las sonatas y los cuentos...dichosos los que pueden ver los fantasmas de las cosas, el alma casi imperceptible de los objetos.